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Hace mucho calor estos días, David le gusta beber la bebida fresca, así que no tiene tanto apetito. La madre no tiene otros remedios sino que le prepara diferentes comidas todos los días. Después de salir de la escuela, David está haciendo las tareas en su habitación hasta la hora de comer.
David huele un sabor picante al salir de la habitación, casi estornuda. Corre hacia la cocina, ve a la madre está vertiendo la comida al plato con el wok, trozos de pollo amarillos y pimientos rojos rodaran sobre el plato, el sabor de los pimientos entra en la nariz, al igual que la llave ya ha abierto la puerta del apetito, y de repente quiere comer mucho. La madre está muy contenta al mirar que David está extático al sabor de la comida, al final no defrauda la receta secreta de pollo picante de la abuela del vecino.
La madre sostiene el plato y anda hacia la mesa, David sigue a la madre con los palillos en su mano, no puede esperar para poner un trozo de pollo en su boca, comiendo mientras levantando su mano a elogiar a la madre: "Es muy delicioso el pollo hecho de la madre." Lo chupa un poquito, siente tan picante que devora mucho arroz. Comiendo así, empieza a sudando David, como si hubiera corrido unas vueltas en el campo de deporte. La madre ve que David no deja de comer aunque es muy picante, le sirve una sopa de lenteja. David ha comido mucho arroz, y toma la sopa, está muy satisfecho y dice: "Muy picante, pero muy delicioso."
La madre le pasa una servilleta, y le limpia el sudor, dice: "Agregué intencionalmente un poco de azúcar, me temía que te sintieras demasiado picante." David ve a la madre que no siente picante el pollo, le pregunta curiosamente: "Mamá, ¿por qué no sientes picante?" La madre se ríe a carcajadas, dice: "Cada persona tiene diferente sensibilidad al chile, algunas personas pueden comer comidas muy picantes y otras no pueden comer ni un poco, esto está relacionado con la herencia, la vida, el entorno y los hábitos."
David está lleno y empieza a pensar en otras preguntas, y pregunta a la madre: "Mamá, ¿cree que por qué siente picante cuando come chile? Además, es la lengua que sabe picante, a veces come chile, y se toca la cara, ¿la cara tendrá una sensación de calor?"
La madre deja los palillos y piensa, luego dice: "Podemos saborear los sabores, por ejemplo, agrio, dulce, amargo y picante, es porque tenemos receptores en nuestra lengua, como sustancias dulces que se unen a los receptores en la lengua, así sabe nuestro cerebro lo que hemos comido era dulce. La razón por la que el chile es tan picante es porque hay algo llamado capsaicina, que se combina con el receptor picante y libera la señal para decir al cerebro que soy picante. Pero el receptor de picante es muy extraño, no sólo hay en la lengua, sino también en la piel y otros órganos internos, eso es porque sientes también calor en tu cara."
"¿Tan milagroso?" David empieza a exclamar.
"No sabes por qué no has limpiado ni has cortado el chile, la mano también siente picante al tocar el chile."
David descubre que el chile no solo es muy delicioso, sino también es muy milagroso, porque incluso siente picante la piel.
Autora: Huang Jing